El tirón de las hipotecas mixtas debilita la hegemonía del tipo fijo
- Las hipotecas fijas suponían en julio el 56,6% del total y ya acumulan un descenso de 10,7 puntos respecto a las contratadas en el mismo periodo de 2022
- Las hipotecas mixtas han pasado de ser el 14% en el primer semestre de 2022 al 30% del total en el primer semestre de 2023
Si la hipoteca ha sido ya de por sí un quebradero de cabeza para muchos, el fuerte avance experimentado por el euríbor en los últimos meses, situándolo por encima del 4%, la ha convertido en una auténtica pesadilla para quienes la tienen a tipo variable. En este contexto, han sido muchos los que han buscado refugio en la seguridad del tipo fijo, hasta el punto de que, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 75,2% de las hipotecas firmadas el pasado marzo fueron de esta modalidad, su porcentaje más elevado. Sin embargo, a lo largo de este año, esta opción ha ido perdiendo fuerza y han ganado popularidad las hipotecas mixtas, un producto con unos intereses más bajos que permite a los hipotecados blindar su mensualidad en un periodo de tipos al alza como el actual y aprovecharse de futuras bajadas del euríbor.
Aumenta la popularidad de las hipotecas mixtas
Así, a la hora de buscar financiación para vivienda, cada vez son más quienes apuestan por las hipotecas con tipo de interés mixto, que combina un interés fijo inicial durante unos años y que luego se vuelve variable. De hecho, según Tecnocasa, las hipotecas mixtas han pasado de ser el 14% en el primer semestre de 2022 al 30% del total en el primer semestre de 2023. Por el contrario, desde que en julio del pasado año alcanzaran su porcentaje más alto (75,2% del total de las contratadas), las hipotecas a tipo fijo no han parado de perder cuota de mercado. De hecho, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 57,8% de las hipotecas firmadas en julio fueron a tipo fijo, marcando su nivel más bajo desde marzo de 2021, cuando supusieron el 56,6% del total.
Caída de la firma de hipotecas fijas
Este cambio de rumbo del tipo fijo queda reflejado también en el descenso que ha experimentado esta opción en los siete primeros meses del año. De acuerdo con las estadísticas del INE, las hipotecas fijas representaron el 62,6% de las contratadas en ese tiempo, frente al 73,3% del mismo periodo del pasado año, lo que supone un retroceso de más de diez puntos, que coincide con el incremento experimentado por las mixtas.
Y es que, en un entorno de tipos altos y con la expectativa de que continúen así durante más tiempo, los hipotecados buscan la seguridad de una cuota estable. Y aunque las mejores hipotecas fijas siguen estando por debajo del valor del euríbor (la mayoría de entidades bancarias cuentan con préstamos hipotecarios fijos con tipos inferiores al 4%), también han experimentado un encarecimiento en los últimos meses.
En este contexto, han irrumpido con fuerza las hipotecas mixtas. Su periodo inicial de tipo fijo garantiza que la cuota mensual de la hipoteca durante ese tiempo va a ser la misma, sin que le afecte el comportamiento del euríbor. Además, el tipo que aplican en estos primeros años suele ser más económico que el que conseguirías con una hipoteca fija. Del mismo modo, en el segundo periodo del préstamo a tipo variable, también suelen ofrecer un diferencial competitivo, que habrá que sumar al euríbor. Si está bajo, se pagará menos dinero, pero si está alto, tocará hacer frente a una cuota mayor.
Este crecimiento de las hipotecas mixtas se ve también en las entidades financieras, que han recuperado y relanzando este producto, mejorando sus condiciones y haciéndolas más atractivas para impulsar su contratación. Así, ahora mismo es posible encontrar esta modalidad en ING, Ibercaja, EVO Banco, Openbank, Pibank, Unicaja o Bankinter, con unos intereses iniciales desde el 2,25% los cinco primeros años.
Periodista multidisciplinar especializada en información económica, marketing y publicidad. Ha desarrollado su carrera profesional en diferentes medios de comunicación, principalmente impresos y digitales, pasando también por la comunicación institucional y corporativa.