Etiquetas DGT eliminadas en Asturias
- La sentencia anula las restricciones de circulación y aparcamiento a los vehículos más antiguos que carezcan de la etiqueta medioambiental de la DGT
- Este cambio también deja en el limbo a todas las multas relacionadas con las zonas de bajas emisiones que fueron puestas en la localidad durante los meses en los que estuvo en funcionamiento la normativa
Como hemos explicado anteriormente en Rastreator, antes de final de año, más de 150 municipios de toda España debían aplicar las Zonas de Bajas Emisiones según se registra en la Ley del Cambio Climático y Transición Energética. Para determinar qué coches pueden entrar en estas áreas habilitadas las autoridades se fijan en la etiqueta medioambiental que tiene el vehículo.
Estos distintivos se clasifican en cuatro grupos. Según determina la DGT, la etiqueta Cero es la destinada a los vehículos más eficientes. Tendrán derecho a esta etiqueta eléctricos de batería (BEV) , eléctricos de autonomía extendida (REEV), eléctricos híbridos enchufables (PHEV) con una autonomía de 40 km o vehículos de pila de combustible. La etiqueta Eco es para los vehículos con autonomía inferior a 40 km, híbridos no enchufables (HEV), vehículos propulsados por gas natural y gas (GNC y GNL) o gas licuado del petróleo (GLP).
La etiqueta C está destinada para aquellos vehículos de combustión interna que cumplen con las últimas emisiones EURO. Y, por último, la etiqueta B es para los vehículos de combustión interna que si bien no cumplen con las últimas especificaciones de las emisiones EURO, sí que lo hacen con anteriores.
Sin embargo, estas etiquetas estarían a punto de desaparecer. El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha tumbado la Ordenanza de Movilidad Sostenible de Gijón. Según detalla el fallo judicial la regulación local de circulación en el centro de la ciudad tenía que ser rechazada por no contener una memoria económica y, por lo tanto, anula las restricciones de circulación y aparcamiento a los vehículos más antiguos que carezcan de la etiqueta medioambiental de la DGT.
El que denunció la falta de esta memoria económica fue Foro Asturias. De hecho, su eliminación fue la medida principal que llevo en el programa electoral este partido político.
Los asturianos vuelven al verano de 2022
Esta medida, vigente desde febrero, ha sido recurrida por el Ayuntamiento de Gijón que defiende que su ordenanza tiene por objetivo cumplir un mandato procedente de la Unión Europea y del Gobierno de España, así como velar por la salud pública y la lucha contra el cambio climático reduciendo la contaminación.
Hasta que el Tribunal Supremo dicte sentencia, la ZBE ya se ha suprimido y todos los coches pueden circular y aparcar por el centro de Gijón, incluso en el área afectado por la zona de pago ORA, en la que no podían estacionar los coches sin etiqueta.
Este cambio también deja en el limbo a todas las multas relacionadas con las zonas de bajas emisiones que fueron puestas en la localidad durante los meses en los que estuvo en funcionamiento la normativa, entre julio de 2022 y febrero de 2023. Depende de como se resuelva, el Ayuntamiento tendría que devolver el importe recaudado por las sanciones ya cobradas.
Este rechazo ha sido un varapalo para esta medida, ya que Gijón fue, junto con Madrid y Barcelona, de las primeras ciudades en poner en marcha las Zonas de Bajas Emisiones. Pero no solo eso, sino que marcó como obligatorio el llevar este distintivo visible en el parabrisas delantero de los vehículos, algo que la DGT marcó como voluntario y lo dejó a decisión de cada ayuntamiento.
Además, hay que recordar que precisamente el funcionamiento de las ZBE eran responsabilidad de cada consistorio y se debía regular a través de la concejalía de circulación y movilidad, que pueden decidir sobre su activación y su regulación, estableciendo las limitaciones que creen convenientes a partir del sistema de etiquetas de la DGT. El Gobierno central solo marcó algunas bases de obligado cumplimiento, aunque el grueso de las normativas eran de los concejos.
Periodista especializada en información económica, principalmente en motor y seguros de coche y moto. Lidia es graduada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y cuenta, además, con un Máster de Radio por la UCM y Radio Nacional de España.