Seguro médico para corredores

  • El presupuesto anual de un corredor suele ser de 475 euros y no incluye un seguro de Salud
  • El 75% de los corredores no se hace una prueba de esfuerzo
  • Los seguros médicos para corredores tienen las ventajas de una póliza normal completada por coberturas exclusivas basadas en su perfil

Más de tres millones de españoles salen a correr de forma habitual. Un número, cada vez más numeroso, que suele invertir una media de 475 euros anuales en zapatillas, ropa, carreras y fisioterapeutas. Muy pocos destinan una parte de este presupuesto a contratar un seguro de Salud apropiado a la actividad física que realizan. Y es que muchos creen que este tipo de pólizas están destinadas a los deportistas de élite que aseguran algunas partes de su cuerpo imprescindibles para desempeñar su trabajo por cantidades millonarias. Quizás se debe a que desconocen la necesidad de estar protegidos ante posibles imprevistos con una vigilancia médica que les aporte seguridad y les proteja de imprevistos. ¿Qué deben incluir estos seguros médicos?

En el deporte de competición existen un control y un cuidado médico claves. A nivel recreacional, la responsabilidad de prevención y la reducción de las consecuencias recaen en el corredor aficionado. Una obligación que adquiere más importancia cuando esta actividad es algo habitual ya que las lesiones o accidentes pueden perturbar la rutina diaria del deportista. Y esto sin tener en cuenta las consecuencias que tendría sobre los objetivos para los que entrena.

Normalmente, la oferta de los seguros de Salud cuyo público objetivo son los atletas aficionados y profesionales suelen contar con las ventajas de una póliza normal. A ésta añaden una serie de coberturas exclusivas pensadas en función de su perfil:

  • Reconocimiento médico
  • Estudio de la pisada
  • Asesoramiento nutricional
  • Cobertura completa para lesiones derivadas de la práctica deportiva
  • Servicio de Urgencias
  • Médicos especialistas en medicina deportiva
  • Extensa red de fisioterapeutas y osteópatas
  • Planes de entrenamiento y, en algunos casos, entrenadores personales

Por otro lado, los seguros de Salud para corredores pueden contar con servicios adicionales como indemnizaciones por lesión, por invalidez o por fallecimiento provocados por la práctica deportiva así como desplazamientos, repatriación o transporte entre las coberturas más demandadas.

Seguros médicos para corredores

Las estadísticas de diversos organismos de salud dejan al descubierto un par de datos que no se pueden pasar por alto. Más del 50% de los corredores (sumando a los aficionados y a los profesionales) han sufrido, al menos, una lesión antes, durante o después de practicar este deporte. Por otro lado, un 75% de los tres millones de españoles que salen a correr habitualmente no se hace una prueba de esfuerzo.

Aunque no lo parezca, se trata de una actividad marcada por el riesgo y por ello es recomendable contar con un seguro médico propio. Los hay muy específicos y destinados para aquellos cuya profesión es correr, pero también se pueden encontrar pólizas para corredores amateur que les protegen ante cualquier imprevisto proporcionando control médico en todo momento. Para ello se valen de una serie de coberturas que no sólo están destinadas a prevenir, también a curar.

Reconocimiento médico

Al contratar un seguro médico para corredores, el médico estudiará y valorará los resultados de este reconocimiento médico para poder prescribir la práctica de este deporte. Se trata de un requisito que se está empezando a convertir en obligatorio para participar en algunas competiciones populares. Incluso algunos gimnasios lo exigen para poder ser socios. Y es que a pesar de su importancia, está muy poco extendido. Normalmente está formado por dos pruebas:

  • Electrocardiograma
  • Ergometría o prueba de esfuerzo

El electrocardiograma es una prueba que registra la actividad eléctrica del corazón que se produce en cada latido. Se usa para medir el ritmo y la regularidad de los mismos, el tamaño y posición de las aurículas y ventrículos, cualquier daño al corazón y los efectos que sobre él puede tener, por ejemplo, la actividad física.

La prueba de esfuerzo, por su parte, consiste en la realización de ejercicio físico en un tapiz rodante o en una bicicleta. Es una técnica diagnóstica que se utiliza para valorar la respuesta del corazón ante esta actividad y ayuda a hacer una estimación de la capacidad de ejercicio físico a la que se le puede someter. Además, es fundamental para poner de manifiesto alteraciones cardiovasculares no presentes mientras el paciente está en reposo y que pueden ocurrir con el ejercicio físico.

Estudio de la pisada

Es una prueba muy relevante para poder correr de forma segura. No en vano, una forma de evitar riesgos a la hora de practicar este deporte es contar con unas zapatillas adecuadas que estén adaptadas a las características morfológicas de los pies del corredor. Por ello, estos seguros médicos incluyen un estudio biomecánico de la pisada y otro osteomuscular y articular. De esta forma, se determina si con las zapatillas adecuadas es suficiente o es necesario el uso de unas plantillas hechas a la medida de los pies del deportista.

Nutrición

Los seguros médicos para corredores ofrecen la posibilidad de orientarles en el tipo de alimentación que deben seguir a la hora de entrenar y competir. Lo hacen a través de un cuadro médico que incluye nutricionistas y dietistas que trabajan de forma personalizada. Les aconsejarán cómo seguir una dieta variada incluyendo todos los grupos de alimentos además de distribuir su ingesta de forma equilibrada en función del ejercicio, el horario y el tiempo dedicado al mismo. Y todo esto sin olvidar una hidratación adecuada.

Servicio de Urgencias

Las pólizas diseñadas especialmente para aquellas personas que salen a correr de forma habitual y participa en diferentes competiciones incluyen en su cobertura médica el servicio de Urgencias. Lo hacen porque si se da un problema médico, es muy importante no perder de vista los síntomas que pueden indicar la presencia de una enfermedad importante, que, generalmente, puede ser cardiaca.

Coberturas adicionales

Dentro de las coberturas adicionales, estos seguros médicos ofrecen un par muy interesantes. Una de ellas afecta a una hipotética baja laboral y otra es la que cubre el fallecimiento del deportista.

Indemnización por baja laboral

Existen algunas pólizas que cuentan con una interesante posibilidad: contratar, de forma opcional, una indemnización diaria para algunos casos específicos. Éstos abarcan, por ejemplo, la hospitalización por una lesión o una enfermedad que son consecuencia de practicar esta actividad deportiva. Es una opción que también puede estar presente en aquellos seguros pensados para personas que practican de forma habitual ciclismo, pádel o tenis.

Fallecimiento

Se trata de casos extremos, pero no atípicos. En las diferentes competiciones que se celebran hay muchos corredores (aficionados y profesionales) que pueden ser víctimas de casos inevitables e inesperados derivados de una actividad tan intensa como esta. Los seguros médicos ofrecen la posibilidad de incluir diferentes tipos de indemnizaciones por lesión, por invalidez o por fallecimiento así como la repatriación o el regreso anticipado, el transporte sanitario o el desplazamiento de un familiar por hospitalización, entre otras opciones. El objetivo no es otro que respaldar a las familias para que se puedan apoyar en estas coberturas y, al menos, no tener que preocuparse por los costes habituales derivados de un fallecimiento.

¿Qué pasa con las carreras?

En España, según la legislación, todos los participantes de una prueba “deben estar cubiertos por un seguro de Responsabilidad Civil que cubra los posibles daños a terceros hasta los mismos límites que para daños personales y materiales establece el Real Decreto 7/2001, de 12 de enero , para el seguro de Responsabilidad Civil de vehículos a motor de suscripción obligatoria”. A esto hay que sumar “un seguro de accidentes que tenga, como mínimo, las coberturas del seguro obligatorio deportivo regulado en el Real Decreto 8/1993, de 4 de junio, sin cuya preceptiva contratación no se podrá celebrar prueba alguna”.

Eso sí, las coberturas suelen variar y en muchas ocasiones los corredores se topan con que son bastante limitadas. Lo más recomendable es informarse acerca del seguro médico que ofrece cada prueba y, sobre todo, de lo que incluye con el objetivo de correr en las condiciones más adecuadas. De hecho, algunas veces la propia organización de la cita ofrece la posibilidad de contratar, de forma adicional, una póliza complementaria. Por otro lado, existen seguros deportivos que cubren aspectos determinados y otros diseñados para eventos concretos como es el caso de las maratones.

Estas pólizas ponen a disposición de los corredores una serie de coberturas que les protegen los días previos al evento, el día de la carrera y el posterior. En ellas están incluidos la invalidez o fallecimiento además de la asistencia médico-farmacéutica por accidente y asistencia en viaje. También cuenta con otros servicios como la repatriación, el regreso anticipado, desplazamiento de un familiar en caso de hospitalización o envío de equipaje, entre otros.

Comparar para encontrar el mejor seguro médico para corredores

Independientemente del deporte que cada persona practique, no está de más informarse acerca de los seguros médicos que existen, este caso, para corredores o para cualquier actividad física. No en vano, todas acarrean algunos riesgos.

Estas pólizas no sólo ofrecen una gran cantidad de especialistas, también cuentan con coberturas diseñadas pensando en aquellas personas que salen a correr de forma habitual y, además, participan en diferentes competiciones. Para elegir el seguro médico más adecuado, lo más recomendable es utilizar el comparador de Rastreator.com. De esta forma se obtendrá, de forma fácil y sencilla, una comparativa a tiempo real con las pólizas que mejor se adaptan a las necesidades de cada corredor.