La política de combustible en los coches de alquiler
- La cláusula de combustible es una de las más importantes en un contrato de alquiler de coches
- Las compañías pueden exigir que el vehículo se devuelva con el depósito vacío, lleno o con los mismos niveles que tenía al entregarse
El trámite para poder alquilar un vehículo es sencillo y la mayoría de las personas pueden realizarlo con éxito. Eso sí, previo cumplimiento de ciertos requisitos relacionados con la edad del conductor y la antigüedad en el carné.
Ahora bien, a la hora de alquilar un coche hay que tener en cuenta determinados factores que pueden encarecer la factura final, como el lugar de su recepción o devolución, el número de conductores, los kilómetros que se pueden recorrer o la política de combustible aplicada por la empresa de rent a car.
El combustible en el coche de alquiler
La cláusula de carburante es uno de los puntos a los que debes prestar atención a la hora de firmar un contrato de alquiler de coche. La política de combustible que aplican las compañías no siempre es la misma, aunque muchas de ellas recogen en su condicionado que hay que devolver el vehículo con el depósito lleno (bajo sanción económica si no se hace), hay algunas que piden devolverlo vacío e incluso las hay que permiten al cliente elegir la modalidad de entrega que más les convenga.
Política de combustible lleno-lleno
En lo que respecta al repostaje, la forma de entrega más habitual exigida por las compañías de alquiler de coches es con el depósito lleno o, en su defecto, con el mismo nivel de carburante que tenía cuando se recogió. Si la modalidad de entrega establecida por la compañía es ésta, en el momento de la recogida del vehículo el cliente tiene que pagar un depósito en concepto de fianza, que le será devuelto íntegro cuando entregue el coche según lo pactado.
Ahora bien, en el caso de que el cliente no efectúe la entrega del vehículo conforme a las condiciones acordadas, entonces la compañía le cobrará el importe correspondiente al consumo realizado más una cantidad que conocida como gastos de gestión.
Política de combustible lleno-vacío
Otra opción posible, que suele ser la menos beneficiosa para los clientes, es la que consiste en entregar el vehículo con el depósito vacío. Esto no quiere decir que la compañía de alquiler regale a sus clientes el combustible consumido sino que se les cobra cuando van a recoger el coche.
Esta condición no significa que el cliente esté obligado a devolver el coche completamente vacío. Una vez entregado, la empresa podrá reembolsar al cliente el precio del carburante no consumido aunque no suele ser lo habitual. Es decir, si llenar el tanque de un coche determinado cuesta 50 euros y el usuario lo entrega medio vacío, entonces la compañía reintegrará al conductor unos 25. Eso sí, no todas las compañías devuelven el importe del combustible no consumido.
El principal inconveniente de esta política es que la cantidad que cobra la compañía en concepto de combustible suele ser superior al precio real de un depósito lleno ya que incluye tasas de gestión.
El seguro de coche y el combustible
Los coches de alquiler cuentan con el seguro obligatorio de Responsabilidad Civil pero los clientes pueden ampliar su protección y contratar otros como el de exención de responsabilidad por daños de colisión (CDW o LDW), el de asistencia (PAI), contra robo (TP o TW) o el de reembolso de la franquicia (DER).
Ahora bien, también es posible contratar un seguro a Todo Riesgo sin Franquicia, que incluya los distintos tipos de coberturas existentes, y que ofrezca una protección completa en caso de siniestro. Así, en caso de accidente, robo del vehículo o rotura de lunas, por ejemplo, será el seguro el que se haga cargo de los costes de reparación o indemnización. Eso sí, siempre y cuando el conductor sea una de las personas declaradas previamente en la póliza (como principal o segundo).
Los productos para cubrir los coches de alquiler también pueden presentar restricciones. Por ejemplo, una de ellas guarda relación con el combustible. Muchas compañías especifican que si el vehículo precisa de la cobertura de asistencia de carretera como consecuencia de falta de gasolina o por haber sido repostado con el carburante erróneo la aseguradora quedará exenta del gasto de prestar esa ayuda. Ahora bien, algunas empresas permiten a los clientes contratar una garantía adicional que cubra el coste de la grúa en estos casos aunque no la negligencia en sí.
Alquilar un coche: rápido y fácil
Alquilar un coche no es un trámite complicado pero requiere atención por parte del cliente ya que hay determinadas clausulas que, de no conocerse, pueden acabar encareciendo la factura. Una de ellas tiene que ver con la política de combustible aplicada por la empresa de alquiler.
Una de las formas de encontrar el vehículo más apropiado al uso que se le quiera dar es a través de un comparador de coches de alquiler como el de Rastreator. Y es que en tan solo unos minutos podrás elegir entre un conjunto de ofertas el mejor vehículo para ti.
Periodista especializada seguros, finanzas, energía y viajes. Lleva escribiendo artículos en Rastreator desde marzo de 2018 para todos los productos de la web.