En España 35.000 personas con VIH no saben que están infectadas
21 de octubre de 2013
En España hay entre 130.000 y 150.000 personas con el VIH de las cuales unas 35.000, en torno al 25%, aún no lo saben. El desconocimiento de estas personas se debe al miedo al estigma y a la discriminación, por falta de una adecuada percepción del riesgo o por vergüenza a acudir al médico. Por unas razones u otras un cuarto de las personas infectadas con esta enfermedad en España aún no se han realizado las pruebas del VIH.
Para sensibilizar sobre la necesidad de la realización de ellas tras una práctica sexual que implique algún riesgo para la transmisión del VIH la Coordinación Estatal de VIH-Sida (CESIDA) ha lanzado la campaña «PrueVa se escribe con V de Vida» que arrancó el pasado día 20, coincidiendo con el Día Nacional de la Prueba del VIH.
Con esta iniciativa CESIDA no sólo pretende sensibilizar a la población sobre la importancia del diagnostico precoz sino también promocionar el test del VIH como «la mejor forma de reducir la elevada tasa de diagnostico tardío del VIH en España que está en torno al 46% de los casos», asegura la asociación en su página web.
Implicaciones sobre la población
El elevado número de personas infectadas de VIH que desconocen su situación tiene implicaciones sobre la salud individual y colectiva.
Para los propios afectados, su desconocimiento les impide beneficiarse de los tratamientos médicos disponibles y por tanto de una mejora del pronóstico y de su calidad de vida. Pero también, por no adoptar las medidas de protección necesarias aumenta el riesgo de transmisión del VIH a otras personas, recuerda CESIDA.
Toni Poveda, director gerente de CESIDA señala que «en el Congreso Mundial de Investigación de la Vacuna del VIH celebrado en Barcelona, se han anunciado importantes avances científicos, pero la realidad es que en la actualidad sólo es posible controlar la expansión del VIH a través de la realización de la prueba. Por este motivo nuestra prioridad es romper con el estigma social con el fin de convertirla en un hábito de salud cotidiano».
Poveda insiste en que «tras la realización de una práctica que comporta una probabilidad de transmisión del VIH, es decir, cualquier relación sexual no protegida, es importante hacerse la prueba del VIH porque además de salvar vidas, evita nuevas infecciones».
Por su parte, el Dr. Jorge del Romero, director del Centro Sandoval de la Comunidad de Madrid y vicepresidente de la Fundación para la Formación e Información de tratamiento en VIH y sida, añade que «el diagnóstico tardío tiene importantes repercusiones en el pronóstico de las personas infectadas por el VIH, pues conocer la infección precozmente implica una mejor respuesta virológica al tratamiento y como consecuencia, disminuye el riesgo de desarrollar la fase sida».
¿Qué es la prueba del VIH?
La prueba del VIH consiste en un sencillo análisis de sangre o una prueba oral, como el test rápido del VIH, cuyo fin es el de determinar el estado serológico, es decir, la presencia o ausencia de anticuerpos frente al VIH.
El desconocimiento y el estigma de las personas con VIH es la principal barrera para no realizarse la prueba por eso la campaña informa sobre el servicio gratuito, anónimo y confidencial de la prueba del VIH, recalca CESIDA.
¿Dónde realizarse la prueba?
Las pruebas se pueden realizar en los centros sanitarios públicos y en los centros de Infecciones de Transmisión Sexual. Además, las ONGs que trabajan en el ámbito del VIH disponen de ellas y cuentan con recursos de apoyo psicológico antes, durante y después de los resultados de la misma.