Uno de cada seis suspensos en la ITV es por las emisiones contaminantes
- 1,3 millones de vehículos no pasaron la inspección técnica porque contaminaban más de lo permitido
- Los defectos en el sistema de alumbrado, en las ruedas y las emisiones son los problemas más frecuentes
La prueba de emisiones de la ITV es una de las asignaturas pendientes para gran parte de los vehículos. El 16% de las inspecciones técnicas desfavorables son por culpa de las emisiones. Es decir, uno de cada seis suspensos en la ITV se debe a que el vehículo contamina más de lo permitido, según los datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
En 2021, último año del que se tienen datos, se detectaron problemas de emisiones contaminantes en 1,3 millones de vehículos, lo que supone un aumento del 9,2% respecto al año anterior. El de las emisiones es ya el tercer motivo de suspenso más frecuente en las inspecciones técnicas de vehículos, tal y como apunta la patronal AECA-ITV.
Alumbrado y señalización, la principal causa de suspenso en la ITV
Tener alguna luz fundida o cualquier otro problema con el alumbrado y la señalización del vehículo es el principal motivo de suspenso de la ITV, con más de 2 millones de deficiencias graves detectadas. En segundo lugar se colocan los defectos en los ejes, ruedas, neumáticos y suspensión, mientras que el tercer lugar lo ocupan las emisiones contaminantes. De hecho, es más frecuente suspender la ITV por la contaminación que no superar la inspección por problemas en los frenos, carrocería, dirección o en el motor.
¿Qué coches deben superar la prueba de humos en la ITV?
Todos los vehículos con motores de combustión interna tienen que superar la prueba de emisiones de la ITV. Es decir, si tienes un vehículo diésel o gasolina tendrás que mantener los niveles de emisiones controlados para pasar la inspección técnica y poder seguir circulando. Sin embargo, la prueba es diferente en función del tipo de motor.
¿Cómo se hace la prueba de gases de la ITV?
La prueba de emisiones de la ITV consiste, en realidad, en dos comprobaciones diferentes. La primera se realiza de manera visual, mientras que en la otra se utiliza un analizador de gases y un lector OBD, que vuelve tras la pandemia con los cambios de la nueva ITV para 2022.
En el caso de los vehículos de gasolina, lo que se mide es la concentración de monóxido de carbono. Si los niveles son muy altos, la combustión no se realiza correctamente o hay problemas en el sistema de postratamiento de emisiones (como el filtro de partículas o el catalizador).
Para los diésel, la prueba consiste en revisar la opacidad de los gases que salen del tubo de escape. Si sale el famoso “humo negro”, también indica problemas de combustión o en el filtro de emisiones.
Después, a los diésel y gasolina que cumplan la normativa Euro 5 o posterior se les debe pasar el OBD, un sistema de diagnóstico a bordo que se conecta a la centralita del vehículo para comprobar que se están cumpliendo los límites legales de emisiones.
¿Es obligatorio el seguro de coche para pasar la ITV?
Otro de los problemas frecuentes tiene que ver con la documentación del vehículo. Casi 200.000 vehículos no superaron la ITV por no tener los papeles en regla, así que antes de pasarla debes asegurarte de que tienes toda la documentación. De hecho, es obligatorio contar con un seguro de coche o moto que cubra, al menos, la responsabilidad civil para poder aprobar la inspección. Si solo necesitas una póliza para llevar el vehículo a la ITV, recuerda que existen seguros por días. En cualquier caso, en el comparador de seguros de coche de Rastreator puedes escoger la póliza que más se ajuste a tus necesidades y analizar las coberturas de las diferentes ofertas para proteger tu vehículo como tú quieras.
Periodista especializado en Economía y Finanzas con experiencia en medios de comunicación desde 2017. Escribe artículos en Rastreator desde septiembre de 2021 para los productos de Seguros, Telefonía y Energía.
