Cómo entender la factura de la luz y sus componentes
- Entender el recibo de la luz es el primer paso para ahorrar y saber si puedes pagar menos con otras ofertas
- La factura de la luz tiene dos conceptos fundamentales: el término fijo, que es la potencia contratada, y el variable, que es el consumo
¿Cómo entender tu factura de la luz?
La factura de la luz está compuesta por dos conceptos principales: coste fijo, basado en la potencia, y coste variable, que depende del consumo. Para entender el recibo, es necesario conocer el significado de cada una de estas partes, así como el de otros elementos importantes, como los impuestos, el alquiler de los contadores eléctricos, peajes o servicios de mantenimiento.
Término potencia, qué es y cómo se calcula
El término de potencia se refiere a la potencia máxima que puede abastecer tu instalación al mismo tiempo. Es decir, cuántos electrodomésticos puedes usar simultáneamente sin que “salten los plomos”. Este término se expresa en kW y se cobra aunque no hayas consumido energía durante el periodo de facturación.
La potencia contratada la puedes comprobar en el resumen de tu contrato, que suele aparecer en la primera página de tu contrato. Si quieres saber cuánto pagas por la potencia, el término fijo aparece en el detalle de la factura, que probablemente esté en la segunda página.
¿Cómo se calcula?
Se multiplica la potencia contratada (en kW) por el precio del kW al día (o al mes) y por el número de días del periodo de facturación. Por ejemplo, si tienes contratada una potencia de 4,6 kW y el precio es de 0,10 €/kW al día durante 30 días, pagarías:
4,6 kW x 0,10 €/kW/día x 30 días = 13,80 €
? Consejo de ahorro: Si no usas muchos electrodomésticos a la vez o vives solo/a, quizá puedas reducir la potencia contratada y así bajar tu gasto fijo mensual.
Qué es y cómo se calcula el término de consumo
Este apartado recoge el coste que corresponde al consumo real de electricidad. Se mide en kWh (kilovatios hora), que es la energía que usas al mantener un aparato de 1.000 W (1 kW) encendido durante una hora.
El importe por el término de energía de la factura representa el coste real a pagar por el consumo eléctrico realizado durante el período de facturación, medido en euros por kilovatio hora. Al depender de tu consumo, este es el factor en el que más puedes ahorrar en tu factura.
Aquí es clave no solo cuántos kWh consumes, sino en qué horarios, si tienes discriminación horaria (es decir: distintos precios para diferentes franjas).
Tipos de tarifas:
- Tarifa sin discriminación horaria: el kWh cuesta lo mismo, independientemente de cuándo consumas.
- Tarifa con discriminación horaria: el precio del kWh varía según el periodo: valle (barato), llano (intermedio) y punta (caro). Con ella puedes ahorrar hasta un 30% en tu factura si te organizas para consumir más en los periodos baratos.
Por ejemplo, en una tarifa con discriminación, programar la lavadora o el lavavajillas por la noche puede suponer un buen ahorro anual.
Alquiler del contador eléctrico
Si no eres propietario del contador, verás un cargo mensual por el alquiler del contador, que es fijado por el Ministerio de Industria y depende de si es analógico o digital. Suele ser de entre 0,80€/mes y 1,50€/mes.
A veces, las comercializadoras también incluyen cargos por servicios adicionales que hayas contratado: mantenimiento, seguros, SOS electricidad, etc. Es recomendable revisar si realmente los necesitas.
Impuesto sobre la electricidad (IEE)
El Impuesto Especial sobre la Electricidad (IEE) en España es del 5,1127%. Este impuesto grava el suministro de electricidad y se calcula sobre la suma de la energía consumida y la potencia contratada, antes de aplicar el IVA.
Este impuesto se aplica en todos los puntos de suministro, incluso si no ha habido consumo durante el periodo de facturación.
Impuesto sobre el valor añadido (IVA)
El IVA es un impuesto general que se aplica en casi todos los bienes y servicios, y entre ellos se encuentra la electricidad. El tipo general actual es del 21%, aunque ha habido periodos en los que se ha reducido el IVA de la factura de la luz como medida temporal para reducir el coste del suministro en los hogares.
En la factura de luz, el IVA se aplica sobre el total de la factura, incluyendo otros impuestos, como el IEE, y cargos.
Ejemplo de factura de la luz explicado paso a paso
Información del consumo
- Consumo total: 200kWh
- Potencia contratada: 3,45 Kw
- Precio potencia Valle: 0,0270 €/Kw día
- Precio potencia Punta: 0,0950 €/Kw día
- Precio de la energía: 0,1194 €/kWh (precio único 24 horas con una tarifa del mercado libre)
- Impuesto electricidad (IEE): 5,1127%
- IVA: 21%
- Alquiler de contador: 0,80€
Término de potencia
Aquí se calcula la parte fija de la factura, la que pagas todos los meses independientemente de tu consumo. Si tienes dos precios de potencia, se calcula el precio de ambos y luego se suman.
Ejemplo de cálculo de potencia
En nuestro ejemplo, tenemos un precio de la potencia punta de 0,0950€/Kw día y un precio valle de 0,0270€/Kw día.
1️⃣Calculamos potencia punta
Potencia contratada (3,45 Kw) × Precio potencia punta (0,0950 €) × Días (30) = 9,83 €
2️⃣Calculamos potencia valle
3,45 Kw × 0,0270 € × 30 = 2,80 €
3️⃣Sumamos el precio de ambas potencias
Potencia punta (9,83 €) + Potencia valle (2,80 €) = 12,63 €
?Este mes, pagarías 12,63 € por la potencia
Término de energía
La forma de calcular el término de energía depende del tipo de tarifa de luz que tengas. Si tienes una de precio fijo 24 horas, basta con multiplicar el precio por el consumo que hayas realizado durante el mes. En cambio, si tienes discriminación horaria, el cálculo se hace por separado para cada periodo.
Ejemplo de cálculo del término de energía
En nuestro ejemplo, tenemos un precio único de 0,1194€/kWh
- Energía consumida (200 kWh) × Precio de la energía (0,1194 €/kWh) = 23,88 €
? Este mes, pagarías 23,88 € por la energía consumida
Alquiler de contador
Es un cargo fijo en tu factura, que se te cobra por usar el contador eléctrico que mide tu consumo. Como el contador pertenece a la distribuidora eléctrica, tú pagas una pequeña cantidad mensual por usarlo.
Ejemplo de cálculo de alquiler de contador
En nuestro ejemplo, pagarás 0,80 € por utilizarlo los 30 días del periodo de facturación.
Impuestos
Encontrarás dos impuestos en tu factura de la luz. Por un lado, el Impuesto Específico sobre la Electricidad, del 5,1127%, y por otro, el IVA, del 21%.
Para calcular los impuestos, paso a paso:
- Sumamos término de potencia, término de energía y alquiler de contador.
- Aplicamos el Impuesto sobre la Electricidad a la suma anterior.
- Aplicamos el IVA a todo, incluido otros impuestos.
Calcular los impuesto de la factura de la luz paso a paso
1️⃣ Suma de potencia (12,63 €), energía (23,88 €) y alquiler de contador (0,80 €)
- 12,63 + 23,88 + 0,80 = 37,31 €
2️⃣ IEE: aplica el impuesto sobre electricidad
- 37,31 × 5,1127% = 1,91 €
- Importe con IEE: 37,31 + 1,91 = 39,22 €
3️⃣ IVA: aplicar el impuesto sobre el total
- 39,22 × 21% = 8,23 €
4️⃣ Total factura: 39,22 + 8,23 = 47,45 €
Resumen final de la factura
¿Qué conceptos influyen en el coste de tu factura?
El importe final de la factura no solo depende de cuánta electricidad consumes, sino que es el resultado de varios conceptos distintos. Algunos de ellos son fijos, mientras que otros son variables. Entender ambos es clave para saber por qué una factura puede dispararse y así poder actuar para reducirla.
Potencia contratada: uno de los conceptos más importantes y también de los más olvidados
- Cuanta más potencia tengas contratada, más pagarás cada mes.
- Es clave contratar la potencia necesaria, sin pasarse.
- Bajar la potencia recude la factura sin cambiar hábitos de consumo
Consumo eléctrico: es más sencillo de comprender porque cuanto más consumes, más pagas
- Depende del número de electrodomésticos, de cómo los uses, su eficiencia y el tiempo que estén encendidos.
- Puedes reducir la factura de la luz cambiando tus hábitos de consumo o contratando una tarifa de luz más barata.
Otros cargos de tu factura: pequeños importes que te hacen pagar más
- Alquiler de contador.
- Otros cargos como servicios de mantenimiento.
Impuestos:
- No dependen del usuario, pero al aplicarse sobre el total de la factura, amplifican cualquier subida de los anteriores conceptos
Consejos para ahorrar en tu factura de la luz
Ahorrar en tu factura de la luz no siempre significa reducir drásticamente el consumo. A menudo, basta con ajustar tus hábitos, revisar la tarifa y controlar las lecturas. Estos consejos te ayudarán a pagar menos sin cambiar tu estilo de vida.
- Controla el consumo real: revisa si tu factura se basa en lecturas reales o estimadas.
- Elige la tarifa que se ajuste a tus hábitos: cambiar de modalidad puede reducir la factura significativamente. Por ejemplo, si pasas mucho tiempo en casa durante el día, una tarifa con precios más baratos en horas valle puede ser más económica.
- Reduce la potencia contratada si es posible.
- Haz un uso eficiente de los electrodomésticos: aprovecha las horas con el precio de la luz más barato y sustituye bombillas y electrodomésticos antiguos por otros más eficientes.
Preguntas frecuentes sobre la factura de la luz
¿Qué es el CUPS en la factura de la luz?
El CUPS (Código Universal del Punto de Suministro): un identificador alfanumérico único asignado a cada instalación eléctrica en España. Lo necesitarás para hacer cualquier gestión.
¿Qué significa PVPC en la factura de la luz?
PVPC son las siglas de Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor, la tarifa del mercado regulado de luz en España. El precio varía según el mercado eléctrico, supervisado por el Gobierno.
¿Dónde aparecen la potencia contratada y el consumo?
En la factura, la potencia contratada aparece en el apartado de “Término de potencia” como un importe fijo mensual, mientras que el consumo se refleja en el “Término de energía” indicando los kWh consumidos y el coste asociado.
¿Cuáles son las diferencias entre el mercado regulado y mercado libre?
El mercado regulado (PVPC) tiene precios fijados por el Gobierno y varían según el mercado diario, mientras que el mercado libre permite elegir comercializadora y tarifa, con precios fijos o variables según la oferta, ofreciendo más flexibilidad, pero sin supervisión directa del Estado sobre el precio.
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