Coches kilómetro cero, ¿qué son y cómo asegurarlos?
- Los coches de km 0 se matriculan en los concesionarios antes de venderlos y suelen ser los que están de exposición
- Los km 0 son más baratos que los nuevos pero el usuario no puede elegir ni el color ni los accesorios del interior, por ejemplo
Nuevo, de segunda mano o de kilómetro 0. A la hora de adquirir un vehículo, los compradores pueden elegir, principalmente, entre estas 3 opciones. Decantarse entre una u otra depende de varios factores como el presupuesto del que disponga el comprador, la marca y modelo que desee conducir o las garantías con las que quiera contar, entre otros.
En principio, un usuario sabe cuáles son las características de un coche nuevo y uno de segunda mano, así como las principales diferencias entre ambos. Las dudas le pueden surgir con otro tipo de vehículos como los denominados «kilómetro 0».
¿Qué es un vehículo de kilómetro 0?
Un coche de kilómetro cero es un vehículo que está matriculado, tiene un propietario (suele ser el concesionario), pero que no ha sido usado. Los kilómetros que tienen son tan pocos que los usuarios pueden adquirir vehículos de este tipo que apenas superen los 10, aunque hay otros que pueden tener unos cientos de kilómetros más.
Por tanto, los coches de kilómetro cero son vehículos nuevos con un kilometraje que se suele limitarse al estrictamente necesario para transportarlo desde, por ejemplo, la fábrica al concesionario. Este tipo de vehículos aunque tiene grandes ventajas, también cuenta con algunos inconvenientes que pueden hacer que algunos usuarios no contemplen su compra.
Ventajas de los Km 0
La principal ventaja de la que puede beneficiarse el usuario es la de comprar un coche nuevo a un precio menor, ya que al haber sido matriculado previamente por el concesionario en vez de por el comprador, ha sufrido una depreciación.
Estos vehículos, a diferencia de lo que suele ocurrir con los de segunda mano, ofrecen al comprador las mismas garantías que uno nuevo. Eso sí, el tiempo de ésta se tiene en cuenta desde el momento en el que el coche fue matriculado y no desde que el usuario lo compra. Es decir, si el vehículo cuenta con una garantía de 2 años y el usuario lo compra a los 2 meses de su matriculación, a los 24 meses iniciales habrá que restarles estos 2.
Inconvenientes de los km 0
Ahora bien, este tipo de vehículos también cuenta con inconvenientes. Debido a que estos coches ya han sido matriculados por el concesionario para ponerlos a la venta, el usuario no puede configurarlo de acuerdo a sus gustos.
El comprador que quiera un coche de km 0 tendrá que conformarse con el que haya en el concesionario. No podrá elegir ni el color ni el modelo. En la mayoría de los casos, tampoco podrá añadirle o quitarle accesorios extras.
A esta casi nulidad de decisión sobre las características del coche se une otro inconveniente: la escasa oferta existente ya que no todos los concesionarios tienen a la venta coches de kilómetro 0 y de disponer de ellos, no suelen ser muchos.
Los coches Km 0 no son seminuevos
Un error en el que no se debe caer es confundir un coche de km 0 con uno seminuevo. Aunque en alguna ocasión puedan llegar a usarse como sinónimos, no lo son. Los coches seminuevos tienen una antigüedad mayor que la de km 0.
Otra de las cosas que caracterizan a estos vehículos es que sí han sido utilizados. Reciben esta denominación aquellos destinados a un uso de pruebas o de gerencia. También pueden considerarse seminuevos aquellos coches que simplemente sean relativamente recientes o hayan recorrido pocos kilómetros.
Seguro de coche para coches km 0
Al comprar un coche km 0, cambiar el nombre del propietario del vehículo y contratar una póliza son los 2 trámites principales que se deben realizar. Y, en cuanto al procedimiento, para un seguro de coche nuevo deberás realizar los mismos trámites que para una póliza de un vehículo de Km0.
Contratar una póliza nueva o traspasar el seguro del coche antiguo son las opciones principales, aunque también es posible suscribir un seguro por días para tenerlo protegido y cumplir con la obligación de aseguramiento exigida por ley. Esta última opción es la mejor en caso de no saber qué seguro elegir.
En el caso de que se opte por la contratación en un primer momento de un seguro provisional, éste sólo tendrá protegido el vehículo por un breve periodo de tiempo y con las coberturas más básicas. Por eso, a la hora de cambiarlo por uno anual, una de las mejores maneras de hacerlo es comparando en Rastreator.com.